(Como no consigo acceder por Internet a las páginas de la Revista Espéculo -digital- de la Universidad Complutense de Madrid, donde se publicó este ensayo, lo traigo al blog, para que así pueda ser consultado por los interesados en la narrativa breve de Carlos Fuentes. Imprescindible leer el relato [https://ciudadseva.com/texto/chac-mool/] antes de prestar atención al análisis que sigue.)
La tarea de representación reviste, pues, en Ribalta, el carácter de un montaje. Exagerando un poco, se podría incluso afirmar que Bruno tiene una visión dureriana en un cuadro rafaelesco.
Victor L. Stoichita: El ojo místico. Pintura y visión
religiosa en el Siglo de Oro español.
"Chac
Mool", que pertenece al primer libro de Carlos Fuentes, Los días enmascarados (1954), es un
relato que goza de gran consideración: no sólo que el propio Fuentes lo
estimara como "el mejor cuento del volumen" (Harss, 349) y que
señalara que estaba recogido en la Antología
del cuento mexicano, sino que también fue el seleccionado de ese primer
volumen para la colección de narraciones de Fuentes Cuerpos y ofrendas. A su vez daba título a otra colección de
relatos cortos del autor que publicó Salvat, prologada por José Donoso: Chac Mool y otros cuentos.
Ahora
bien, el general reconocimiento de que se trata de uno de los mejores relatos
del autor no va acompañado por una paralela atención crítica. En muchos de los
estudios sobre al autor se lo despacha brevemente con alguna alusión a la
pervivencia del pasado prehispánico en el México actual, y poco más.